19.11.06

Ruth I. Völler

Con sólo 15 años y luego de una esctricta preparación vocal, Ruth I. Völler se une a la cuerda de Sopranos del Coro Polifónico de Innsbruck (foto). Cumple su función con creces, pero, durante un ensayo, la Sra. Directora le hace un observación: “Joven Ruth, su trabajo como soprano es inobjetable, pero advierto que posee graves fuera de lo común. Hoy cantará como Contralto. Es una orden.” Pese a la dureza de la Sra. Directora, la decisión es un gran acierto. Ruth se siente más cómoda cantando en ese registro y esto la motiva a buscar un nuevo maestro que la ayude a reeducar su voz.


Parte rumbo a Buenos Aires y se entrevista con el Prof. Juan Pedro Silva, quien, al escucharla vocalizar, no deja de asombrarse: “¡No lo puedo creer! ¡Cantás un Do3! No sé cómo no se avivaron, vos sos Tenor de acá a la China”. Ruth malintrepreta las palabras de Juan Pedro y viaja a Pekín, con el propósito de encontrar un docente capaz de formarla, pese a su anormal registro de Tenor. Por ese entonces, en oriente, la enseñanza de música occidental es duramente penada y encontrar un maestro coral no resulta fácil. Sin embargo, Ruth tiene la suerte de toparse con el gran director Alessandro Capella, que le otorga una audición en la Gran Muralla China. La respuesta es unívoca: “Srta. Völler, usted puede cantar notas de Bajo. Este es un caso único, le recomiendo consultar a un médico”

Preocupada por una posible lesión en las cuerdas vocales, Ruth acude al consultorio de una foniatra. Luego de un minucioso análisis, esta le responde: “Debido a una deficiente educación vocal, usted ha forzado su aparato fonador y ha alcanzado notas agudas, ajenas a su registro. Afortunadamente, sus cuerdas están intactas. Eso sí, Srta. Ruth, debo decirle que usted es un hombre”.