Hoy es 10 de noviembre, Día del Dibujante. Como todos los años, recordaré al gran Emerson Valdivia, artista injustamente ejecutado en Texas, en 1983. En su memoria, transcribiré el testamento que Valdivia entregara a su verdugo.
En Laredo, Texas, a los veinte días de febrero de mil novecientos ochenta y tres: Yo, Emerson Valdivia, hijo de Liza Spectrum y Anastasio Valdivia, hallándome en pleno uso de mis facultades mentales, redacto este testamento ológrafo que anula cuantos hubiera hecho anteriormente (aunque no recuerdo haber escrito ningún otro) y, pese a que mi humilde ocupación de dibujante me ha impedido acumular fortuna y percibir regalías por mis ilustraciones, dispongo que mis escasos bienes sean distribuidos del siguiente modo:
1. Dono al Zoo de San Diego mis dos cabras Anastasia y Liza.
2. Obsequio mi lápiz mecánico Pilot (sin minas) a la ENET Ing. Huergo, de Bs. As.
3. Ordeno que el pago de U$S 60.- que aún me adeuda la agencia T&W Communication Inc. sea acreditado en la cuenta de algún dibujante sudamericano. Ruego al acreedor de dicha suma, que cancele la deuda que mantengo con la propietaria del hotel Santa Mónica, del cual he tenido que huir a hurtadillas debido a mi insolvencia.
Esta es mi voluntad, que deseo y mando sea fielmente cumplida.
Emerson Valdivia. Laredo, Texas, 20-02-MCMLXXXIII.
Foto: Pese a sus esfuerzos por ocultar su identidad, Valdivia es sorprendido por un paparazzi, en Plaza Irlanda.
1. Dono al Zoo de San Diego mis dos cabras Anastasia y Liza.
2. Obsequio mi lápiz mecánico Pilot (sin minas) a la ENET Ing. Huergo, de Bs. As.
3. Ordeno que el pago de U$S 60.- que aún me adeuda la agencia T&W Communication Inc. sea acreditado en la cuenta de algún dibujante sudamericano. Ruego al acreedor de dicha suma, que cancele la deuda que mantengo con la propietaria del hotel Santa Mónica, del cual he tenido que huir a hurtadillas debido a mi insolvencia.
Esta es mi voluntad, que deseo y mando sea fielmente cumplida.
Emerson Valdivia. Laredo, Texas, 20-02-MCMLXXXIII.
Foto: Pese a sus esfuerzos por ocultar su identidad, Valdivia es sorprendido por un paparazzi, en Plaza Irlanda.